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Artículo nº10 – «El Lavatorio De Los Pies», la marcha procesional del Tercio Femenino de Santiago Apóstol

01/04/2022AGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGO APÓSTOLCOFRADÍA CALIFORNIAEL LAVATORIO DE LOS PIESNOTICIASTERCIO FEMENINO «EL LAVATORIO DE LOS PIES»

Cuando llegué a Cartagena para incorporarme a la Unidad de Música del Tercio de Levante y a poco que entré en contacto con la sociedad cartagenera, pude observar la fuerza y dedicación que se vivía en torno a la Semana Santa.

Nada había, ni por aproximación, que pudiera sobrepasar el interés que los cartageneros de toda condición dedicaban a sus desfiles pasionales, conscientes de saberse artífices de realizar, probablemente, las mejores procesiones.

Yo, que llegaba a esta ciudad habiendo participado en procesiones como las de Cuenca, Granada, Toro, Zamora, Ciudad Real y Antequera, de muy dispar valoración por mi parte, cuando escuchaba con el énfasis con el que los cartageneros hablaban de sus desfiles como los mejores, pensé de inmediato que aquello era una hipérbole. No, no era una exageración. Cuando presencié por primera vez estas procesiones, tengo que confesar que me impactaron. Eran diferentes, únicas y, a día de hoy, lo siguen siendo.

Sus famosos cuatro pilares: luz, flor, orden y música producen una amalgama de sensaciones que las convierten en insuperables. Esta conjunción de elementos se complementan de tal manera que el resultado es una auténtica obra de arte: la flor reclama luz, la luz, orden y el orden necesita de la música.

Como músico, me llamó la atención la importancia de esta, el protagonismo de las bandas, uniformadas con sus túnicas; la selección de las marchas, verdaderas obras de arte, con la peculiaridad de que cada una de ellas se identifica con una agrupación.

La grandeza de la Semana Santa de Cartagena no puede entenderse sin la música.

A tenor de todo ello, he de apuntar que mi aportación a la música ha sido fundamentalmente como intérprete. En una primera etapa, como instrumentista (mi instrumento es el saxofón), y posteriormente como director de varias agrupaciones musicales. Sumando ambos periodos, calculo que habré participado aproximadamente en alrededor de doscientas procesiones. Cuánto redoble de tambor, cuántas marchas interpretadas, en definitiva, mucho esfuerzo y cansancio en el cuerpo, pero siempre con el mejor de los ánimos, teniendo como objetivo la aportación de la música para mayor lucimiento de los desfiles pasionales.

Por respeto a la música y, en particular, a los compositores tan notables que han hecho posible las maravillosas obras que suenan en las procesiones, no encontraba momento para sumarme al grupo de estos creadores, porque me sentía incapaz de realizar una obra merecedora de ser tenida en cuenta. Sin embargo, gracias a los consejos de mi buen amigo José Manuel Nadal Díaz, destacado miembro de la Agrupación de Santiago Apóstol y también de la Unión Musical Cartagonova, me puse delante de un papel pautado en blanco y decidí escribir una marcha lenta. El resultado de esta “aventura” se llama El lavatorio de los pies y está dedicada al tercio femenino que lleva su nombre.

Escrita en la tonalidad de Fa menor, la obra tiene una estructura tradicional y un contenido musical muy del gusto de esta tierra. En primer lugar, una solemne y brillante introducción da paso a la primera sección, que contiene dos temas de ocho compases cada uno, siendo el primero muy lírico, con una base de ritmos sincopados y en la tonalidad principal (Fa menor), mientras que el segundo se muestra más solemne y marcial, escrito en la tonalidad de La bemol Mayor. Una transición, en forma de pequeña fuga, nos remite al primero de los temas, para pasar, a continuación, al trío (parte final), que aparece en la tonalidad de Fa Mayor. La obra finaliza con la repetición del trío, con gran sonoridad por parte de toda la banda.

En definitiva, esta es mi primera aportación a este género musical. No me corresponde a mí hacer un juicio de valor sobre la misma. Solo puedo decir que siento una gran satisfacción al saber que mi marcha El lavatorio de los pies sonará, cada Martes Santo y Miércoles Santo, por las calles de Cartagena.

                            Jaime Belda Cantavella
Compositor y director de la Unión Musical Cartagonova

«El Lavatorio De Los Pies» Jaime Belda Cantavella

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Cena de gala año 2022

28/03/2022AGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGO APÓSTOLEL LAVATORIO DE LOS PIESLA ELECCIÓN DE LOS ZEBEDEOSNOTICIASTERCIO FEMENINO «EL LAVATORIO DE LOS PIES»

El próximo jueves 7 de abril se celebra la Cena de Gala de la Agrupación. Este año volverá a tener lugar en el Hotel Alfonso XIII y para apuntarse a ella hay que contactar con el vocal de protocolo de la agrupación, Sergio Sánchez, en el teléfono: 638 091 830.

En esta cena además se realizan las correspondientes entregas de distinciones a los hermanos de la agrupación por su antigüedad en la misma, hachotes de plata a penitentes y portapasos, además del bingo benéfico para el tercio femenino de «El Lavatorio De Los Pies».

El precio es de 39€ y el menú es el siguiente:

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Artículo nº9 – POEMA al Apóstol Santiago

27/03/2022AGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGO APÓSTOLCOFRADÍA CALIFORNIAEL LAVATORIO DE LOS PIESLA ELECCIÓN DE LOS ZEBEDEOSNOTICIASTERCIO FEMENINO «EL LAVATORIO DE LOS PIES»

EL APÓSTOL SANTIAGO

Comienza el batir de los tambores:

noche de Martes Santo en Cartagena.

Olor a incienso, a azahar, a flores,

el precioso trono, de luz se llena.

Muy pronto recorrerás en silencio

 las calles de mi hermosa tierra,

como hiciste antaño en el tiempo,

anunciando una “Buena Nueva”.

Son tus colores, rojo y blanco,

sangre y luz que tu corazón guarda,

Luz del Evangelio que te llenó de amores,

sangre en tu martirio derramada.

Vas al encuentro de tus hermanos,

Pedro y Juan; te aguardan en el camino,

para daros juntos mil abrazos,

para llegar juntos a vuestro destino.

Tus portapasos, con orgullo, te mecen

con la gran fuerza de su Amor,

comentándote entre dientes

“¡Que tuya es la calle Mayor!”.

El penitente balancea su capa,

con ese andar lento y elegante,

para darle aire fresco a tu cara

e iluminar dulcemente tu semblante.

El Martes Santo ya se acaba,

camino vas a la iglesia de Santa María;

el pueblo entero te aplaude y aclama

por tu eterna y veraz valentía.

Tal era tu fuerza y tu vehemencia

que Jesús te llamó “Hijo del Trueno”.

No obstante, te otorgó licencia

para predicar su Evangelio con empeño.

Tu gran mensaje nos dio la Vida.

Por eso, a nadie le extraña

que en esta tierra se diga…

“¡Santiago; y cierra España!”.

Descansa esta noche, amigo,

que tengas un sueño reparador,

que mañana estará contigo

la Madre del Primer Dolor.

Ana Ros Serrano
Mayordomo de Culto de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Resucitado

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FECHAS y DATOS de 2022 a tener en cuenta por parte de PENITENTES

23/03/2022AGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGO APÓSTOLCOFRADÍA CALIFORNIAEL LAVATORIO DE LOS PIESLA ELECCIÓN DE LOS ZEBEDEOSNOTICIASTERCIO FEMENINO «EL LAVATORIO DE LOS PIES»

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Artículo nº8 – Proceso de la obra central del Sudario de «El Lavatorio De Los Pies» y ApasionArte, una exposición con alma santiaguista

23/03/2022 AGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGO APÓSTOLCOFRADÍA CALIFORNIAEL LAVATORIO DE LOS PIESNOTICIASTERCIO FEMENINO «EL LAVATORIO DE LOS PIES»

En mi caso creo que ser Californio y Santiaguista se nace, ya que yo nací en el seno de una familia marraja.

El pertenecer a la Agrupación de Santiago Apóstol es todo un orgullo, ya que la he visto crecer y lograr ser una de las grandes de la Semana Santa de Cartagena gracias al buen hacer de su directiva y de sus hermanos.

Cuando me propusieron realizar la pintura central que luce el Sudario del tercio femenino (El Lavatorio De Los Pies), asumí una gran responsabilidad como artista y hermano de la agrupación y, al mismo tiempo, una alegría muy grande, ya que como cartagenero y santiaguista, creo que no existe mayor privilegio para un artista que el ver procesionar una de sus obras por las calles de su querida ciudad y aun más cuando es en la agrupación de toda su vida, por eso puedo decir sin equivocarme que este es el trabajo más importante que realicé y realizaré como artista, al menos en lo sentimental.

Al comenzar a realizar los primeros bocetos para presentarlos a la directiva, pensé que lo mejor sería realizar una obra que simplemente representara y dijera, con un solo vistazo, de qué tercio se trataba (El Lavatorio de los Pies), por eso me centré únicamente en representar una palangana, un pie y unas manos lavándolo, de esta forma cumplimos el dicho de “una imagen vale más que mil palabras”.

Nada más darme el visto bueno la directiva y luz verde para comenzar el proyecto, tocaba realizar el boceto final y pensar dónde y cómo plasmarlo para que su lucimiento y durabilidad fuesen permanentes. Finalmente, decidí realizar la obra sobre un lienzo de algodón y lino. El primer paso fue darle una imprimación al lienzo por ambas caras, de esta forma taparíamos todos los poros del tejido y daríamos más agarre a la pintura. Seguidamente, realicé un boceto a grafito sobre el lienzo fijándome muy bien en las dimensiones para que encajase perfectamente en su sitio dentro del Sudario, dado que una obra que va incrustada o fijada dentro de un Sudario, con tanto bordado, necesita unas dimensiones muy precisas, con espacio suficiente para que respire, pero sin dejar demasiado espacio y se vea finalmente pequeña. La siguiente decisión fue qué técnica utilizar para pintar la obra. En este sentido, creo que la decisión que tomé fue la más acertada: una técnica mixta de acrílico y óleo, que una vez terminada, fue fijada con varias capas de barniz por ambas caras. Como artista, una vez terminado todo el trabajo y viendo el resultado final, solo puedo decir que me siento muy contento y orgulloso de esta obra.

Nunca pensé que después de ver procesionar mi obra en el Sudario, en 2017, la Agrupación me tenía preparado otro “regalo”: el encargo de realizar las imágenes de los doce Apóstoles que lucirían en los hachotes del tercio femenino de Santiago Apóstol. Estas obras ya son una realidad para la Agrupación.

Primer boceto a lápiz
Comenzando con el lienzo
Perfilando y dando profundidad
Comprobando medidas
Gabriel Guillén con el lienzo real
Gabriel Guillén junto al sudario

Cuando en una de las reuniones de la Agrupación se comentó el coste tan grande que suponía crear un grupo escultórico para el Trono del Tercio del Lavatorio de los Pies, pensé que, como hermano de la Agrupación, mi deber era al menos intentar aportar mi granito de arena, entonces fue cuando se me ocurrió crear ApasionArte, una exposición de pintura en la cual cada año participasen artistas de primer nivel y que donaran parte del dinero de las ventas a la Agrupación.

Tras comentar dicha idea a la directiva y recibir la aprobación, aquella se puso manos a la obra para que esta exposición se realizase en un lugar emblemático, las antiguas cocheras del Gobierno Militar en la Plaza del Ayuntamiento de Cartagena.

En el momento de buscar artistas para la exposición, tengo que destacar la total disposición de todos mis colegas al proponérselo, incluso teniendo que tomar la decisión de que cada año participasen distintos para no dejar a nadie fuera.

Hasta la fecha son bastantes los artistas que han pasado como Domingo Martínez Garrido, Álvaro Peña, Marcos Amorós, Salvador Torres, Laura Molina, Piedad Martínez Torres, Javier Lorente, Antonio Pellicer, Fernando Arribillaga y los escultores Antonio Soler y Fernando Sáenz de Elorrieta.

Gracias a este elenco de artistas y a la buena disposición de la directiva y de los representantes de nuestras Fuerzas Armadas en poner a nuestra disposición sus instalaciones, ApasionArte ya está consolidada como un referente artístico en nuestra querida ciudad de Cartagena.

Gabriel Guillén Álvarez
Artista y Caballero Portapasos

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Artículo nº5 – PROCESO DE INTERVENCIÓN EN LA IMAGEN DE SANTIAGO

11/03/2022AGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGO APÓSTOLCOFRADÍA CALIFORNIAEL LAVATORIO DE LOS PIESLA ELECCIÓN DE LOS ZEBEDEOSNOTICIASTERCIO FEMENINO «EL LAVATORIO DE LOS PIES»

Durante los años 2016 y 2017, la imagen de Santiago Apóstol, perteneciente a la Cofradía California de Cartagena, fue intervenida en el Centro de Restauración de la Región de Murcia. Una restauración derivada de la presencia en la obra de algunas alteraciones puntuales que llevaron a la Agrupación a realizar la correspondiente solicitud para que la imagen fuese intervenida.

Tras la Semana Santa de 2016, la imagen fue trasladada hasta las instalaciones que el Centro de Restauración de la CARM tiene en el Polígono Industrial Oeste de Alcantarilla.

A su llegada, se procede a realizar un pormenorizado estudio de la obra para conocer, con todo detalle, cuál era su estado de conservación real, identificando y localizando cada una las alteraciones que en aquellos momentos presentaba.

Un análisis que comenzó por el examen de la escultura con luz visible, aplicando esta con distintos ángulos, a fin de detectar hasta la más mínima irregularidad, documentando todo el proceso fotográficamente. Y que continuó con el estudio de la fluorescencia ultravioleta a fin de localizar cualquier alteración existente en la película pictórica y capa de barniz. Completando el estudio previo con la realización de distintas radiografías a fin de analizar el interior de la escultura.

Todo ello permitió conocer, no solo los deterioros que sufría la obra, sino también cómo fue construida por Sánchez Lozano. Encontrándonos ante una imagen de vestir típica de este escultor. Compuesta por un torso de madera en el que va encajado el busto, y del que salen dos brazos fijos, anclados al torso con sendos tornillos –tal y como se pudo apreciar radiográficamente-. De estos brazos parten dos antebrazos móviles que se fijan con un tornillo, a fin de facilitar su movimiento y la movilidad del elemento de cara a la vestimenta de la imagen. Un torso que se apoya sobre la denominada devanadera, una sencilla estructura, habitual en todas las imágenes de vestir, que a su vez fue enlienzada para “adecentar” el aspecto de la imagen sagrada; algo muy habitual en la producción escultórica del imaginero José Sánchez Lozano.

En lo que se refiere al estado de conservación, la imagen de Santiago Apóstol presentaba un relativo buen estado, pues tan solo fueron detectados algunos repintes puntuales en la cabellera, barba, manos y pies, así como pequeños roces como consecuencia del uso procesional de la imagen, la fractura del dedo gordo de la mano derecha, y algunas fisuras en la madera provocadas por el movimiento natural de esta.  En la parte inferior del enlienzado de la devanadera existía un extraño corte horizontal; no hallando otras patologías o daños de importancia.

Los repintes existentes habían sido aplicados con más buena intención que acierto con la finalidad de disimular pequeños roces sobre la policromía original. Respecto a las fisuras detectadas, estas eran de dos tipos: las originadas como consecuencia del movimiento natural de la madera (situados en el torso), y las que eran como consecuencia de la separación de piezas de madera (situados en la parte posterior del cuello). Encontrando una serie de pequeños daños -roces e incluso la fractura del dedo pulgar de la mano izquierda, que habían sido ocasionados por el habitual uso procesional de la imagen.

Siendo llamativo el corte perimetral que presentaba el enlienzado que cubre la estructura de devanadera, ya que era evidente que había sido realizado expresamente, quizás con la intención de facilitar los movimientos de la efigie al trono y viceversa. Una retirada que, sin embargo, tiempo después había sido revertida, volviendo a llevar al sitio el elemento retirado mediante la aplicación de un cordón de silicona.

Fotografía con luz ultravioleta para la detección de repintes
Fotografía con luz ultravioleta para la detección de repintes
Fotografía con luz ultravioleta para la detección de repintes
Estado inicial de la peana con el enlienzado
Detalle del corte que presentaba el enlienzado en su mitad inferior, nuevamente pegado con un cordón de silicona

La intervención de la obra consistió primeramente en una limpieza de la suciedad superficial con ayuda de aspiración, seguida de una segunda limpieza de la suciedad generalizada de la superficie cromática. Realizando a continuación una eliminación, tras la realización de pruebas de solubilidad, de cada uno de los repintes previamente detectados en manos, pies, cabeza y cuello; lo que dejó al descubierto pequeños roces y daños que, en realidad, eran el motivo de la aplicación de repintes.

Respecto a las grietas y fisuras existentes, estas fueron selladas mediante la inserción de pequeñas piezas de madera de balsa y resina epoxídica.

Paralelamente a este trabajo se retiró el cordón de silicona que unía el enlienzado cortado al resto de enlienzado original, llevándolo de nuevo a su sitio, procediéndose a reforzar internamente la tela mediante parches, empleando resina epoxídica puntualmente dado el espesor de los estratos. Una vez acabado se realizó el estucado de las carencias, nivelando la superficie. Aprovechando el momento para el estucado de cada una de las carencias existentes en la figura.

Tras un barnizado intermedio que sellase las superficies y subiese el tono de la película pictórica, se procedió a reintegrar cromáticamente las pequeñas faltas de color existentes, acabando el proceso con el preceptivo barnizado final de protección que se le da a todas las obras.

En definitiva, una intervención que subsanó los daños detectados en esta icónica imagen de la Cofradía California.

La imagen llegó a la ciudad de Cartagena en la Cuaresma del 2017, siendo recibida por varios directivos de la Agrupación, el Hermano Mayor de la Cofradía California, el jefe de Servicio del Centro de Restauración y entregada por la entonces Consejera de Cultura, Noelia Arroyo y la Directora General de Bienes Culturales, María Comas. Posteriormente, la imagen quedó expuesta en el vestíbulo del Palacio de Aguirre para ser admirada por los ciudadanos, que se acercaron a contemplarla.

IMÁGENES DE LA RESTAURACIÓN.

Sellado y cosido de grietas en la cabeza
Estucado hombro derecho
Estucado dedo gordo de la mano izquierda
Estucado mitad inferior de la devanadera
Separación del dedo fracturado de la mano izquierda
Sellado y cosido de grietas en la parte posterior del busto del Santo

IMÁGENES TOMADAS EN EL CENTRO DE RESTAURACIÓN, ANTES DE LA ENTREGA.

Imagen 1
Imagen 2
Imagen 3
Imagen 4

IMÁGENES DE LA ENTREGA OFICIAL DE LA IMAGEN EN EL PALACIO DE AGUIRRE, EN CARTAGENA.

Imagen 5
Imagen 6
Imagen 7
Imagen 8
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Artículo nº4 – EL SANTIAGO Y LA CONSTANCIA, UN CLARO EJEMPLO DE AMISTAD

08/03/2022AGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGO APÓSTOLCOFRADÍA CALIFORNIAEL LAVATORIO DE LOS PIESLA ELECCIÓN DE LOS ZEBEDEOSNOTICIASSUM LA CONSTANCIATERCIO FEMENINO «EL LAVATORIO DE LOS PIES»

La amistad es un valor universal. Promueve un dar, un darse, y para ello es necesario encontrarse y conservar. Es un cariño, un aprecio mutuo entre las personas, en este caso entre agrupación y asociación.

Por su misma naturaleza social, el ser humano no puede vivir en soledad y aislado. Todos necesitamos alguien en quien confiar, a quien llamar cuando las cosas se ponen difíciles, con quien compartir los buenos momentos. Los amigos se hacen de improviso y muchas veces sin buscarlos.

Convicciones, sentimientos, gustos, aficiones, opiniones, ideas políticas, creencias, religión son algunos de los factores que influyen en la formación de amistades y la historia de la unión entre El Santiago y La Constancia es un decálogo de estos factores, es una historia que se debería editar y proclamar para que la conozcan las generaciones futuras y engrose los valores de nuestra sociedad más cercana.

De aquí nace la historia que une a LA CONSTANCIA y AL SANTIAGO, que brota de la amistad.

Me contaba nuestro queridísimo Presidente que el azar hizo que veraneara cerca de un amigo que también fue presidente de la Banda de Torrevieja y, por el azar también, un año esta banda no podía cumplir con el compromiso adquirido de acompañar al Santiago porque su ayuntamiento les había pedido que hicieran una procesión en su ciudad. Por casualidad y por amistad, se lo dijo a su amigo Pedro Aguilar, primer presidente de la S.U.M. LA CONSTANCIA de Catral. A partir de ahí se forjó todo lo que hasta el día de hoy hemos creado.

 LA VERDADERA AMISTAD, LA CONSTANCIA Y EL SANTIAGO

Una verdadera amistad se forma cuando hay algo en común. Ese algo en común puede ser un gusto musical, una misma profesión, una misma carrera, un pasatiempo, etc. En nuestro caso fue la música y la Semana Santa.

Con el tiempo, la amistad puede desarrollarse más profundamente mediante el trato, el conocimiento y el afecto mutuo.

Es necesario conocer bien al amigo, saber su historia pasada, sus quehaceres actuales y sus planes de futuro, el sentido que da a su vida, sus convicciones, sus gustos y aficiones, sus defectos y virtudes, en fin, saber de su vida, de su forma de ser… Es preciso comprenderle. Los verdaderos amigos se ayudan desinteresadamente. Al amigo se le quiere, acepta y tolera por lo que es, no por lo que tiene o por lo que puede dar.
La amistad se orienta hacia el  y consiste más en servir que en ser servido. El compañero o el camarada no siempre es un amigo, como tampoco es un amigo el que busca aprovecharse del otro. Ser amigos no consiste en un comercio de beneficios.

Cuántas malas épocas hemos pasado juntos y siempre hemos estado uno al lado del otro.

Un verdadero amigo es a la vez un modelo, un consejero y un juez (Paul Carton)

BRINDAR AMISTAD VALE LA PENA Y ASÍ LO HACEMOS HABITUALMENTE EL SANTIAGO Y LA CONSTANCIA

No es fácil encontrar un buen amigo ni ser un amigo de verdad, pero vale la pena intentarlo. Contar con amigos es una felicidad.

Es un gozo estar con ellos, charlar, ayudarles o ser ayudado y disfrutar y alegrarse con ellos. Por eso, aunque exija esfuerzo, vale la pena procurar ser y contar con un amigo.

Amistad es comportarte con el amigo como consigo mismo (Aristóteles).

NUESTRA AMISTAD, LA CONSTANCIA y EL SANTIAGO, UN DECÁLOGO PARA ENMARCAR

La CONFIANZA entre El Santiago y La Constancia ha sido más que demostrada en innumerables momentos como los vividos en los años malos de nuestra banda de música actuando en Cartagena muy mermados de efectivos. Hay que creer lo que dice el amigo, pero sobre todo creer en el amigo. Confiar en el amigo significa tener la seguridad moral de que responderá favorablemente a las expectativas y a las esperanzas que depositemos en él.

También la ENTREGA es la generosidad en el más amplio sentido. El buen amigo es generoso, entrega sus cualidades, su tiempo, sus posesiones, sus energías, sus saberes. Muchas gracias hay que dar al Santiago y a sus Santiaguistas por organizarnos un concierto o una grabación cuando lo hemos necesitado. La Constancia también ha estado con El Santiago en cada proyecto loco, en cada difícil idea.

Es una suerte para nosotros contar con su LEALTAD. La mayor riqueza con la que puede contar una persona es la lealtad de un amigo. Ser leal supone ser persona de palabra, que responde con fidelidad a los compromisos que la amistad lleva consigo. Los amigos leales son nobles, no murmuran, no traicionan una confidencia personal, son veraces y, en el lugar y en el momento oportuno, critican objetiva y constructivamente. Lealtad es también defender los intereses y el buen nombre de los amigos; es hablar claro, ser franco.

De todo esto hemos tenido a raudales, en buenos y malos momentos, por esto nuestro más sentido AGRADECIMIENTO. El agradecimiento es el más efímero de los sentidos humanos y con frecuencia se considera innecesario. Sin embargo, los verdaderos amigos tienen bien desarrollado el sentimiento de gratitud. Podemos agradecer al amigo su tiempo, los buenos ratos que nos hace pasar, su ayuda cuando nos sentimos mal, por pequeños detalles que nos demuestran su afecto.

El amigo ha de ser como la sangre, que acude luego a la herida sin esperar a que le llamen (Quevedo)

ALGO QUE NO PRACTICAN EL SANTIAGO Y LA CONSTANCIA: EL EGOÍSMO, ENEMIGO MORTAL DE LA AMISTAD

El orgullo, la envidia y el egoísmo no caben en la amistad. Es necesario reprimir el yo para que se forme la amistad. El egoísmo hace que la persona se centre solo en sí mismo y no permite que mire más allá de sus propias cualidades, de sus intereses. Impide que los seres humanos se ayuden entre sí.
No olvides: es fácil hacer amigos, pero es difícil mantenerlos. Es fácil hacer un hermanamiento con cualquier asociación, pero hacer que de verdad cada uno de sus miembros sienta que son parte de la otra asociación, sienta que hay un pedacito suyo en otra ciudad o pueblo no es sencillo y aquí se ha conseguido. EL SANTIAGO y LA CONSTANCIA son algo más que dos asociaciones hermanadas, cada una es parte de la otra.

La vida pone a prueba la generosidad, la lealtad y el agradecimiento; las amistades se cultivan maduran y no siempre perduran.                                                   

Estos días, escribiendo desde el retiro forzoso de un confinamiento más y pensando en la relación que nos une AL SANTIAGO y a LA CONSTANCIA, no puedo evitar pararme a releer uno de los libros de amor más bellos de la literatura universal, el cual me fue descubierto y regalado por un gran amigo. Forma parte de la Biblia.  Es un canto al amor, con algo de inocencia original, paradisíaca, y mucho de sueño ideal, definitivo. Aunque es un canto de amor creo que se puede llevar a la amistad verdadera, esa que nos une y por ello me gustaría terminar con un bello poema de El Cantar de los Cantares llamado ABRAZO.

ABRAZO

¡Oh, si tú fueras mi hermano,
un tierno niño de pecho!
Al encontrarse en la calle,
yo te comería a besos;

te echaría en mis brazos
sin tener burlas, desprecios;
te metería en la casa
de mi madre, y allí dentro
te haría beber un vino
de granadas, que yo mezclo.
Reclinando en mi cabeza
sobre tu brazo derecho,
tu brazo izquierdo me ciñe
en el lazo más estrecho.

Muchachas de Jerusalén,
yo os conjuro por los cielos:
No despertéis a la amada,
dejadla en su dulce sueño.

Leonardo Miguel Martínez Cayuelas
Director S.U.M. La Constancia de Catral

S.U.M. La Constancia de Catral en procesión con la Agrupación de Santiago Apóstol
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Artículo nº3 – El Año Santo Jacobeo: reseña histórica y tradición

07/03/2022AGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGO APÓSTOLEL LAVATORIO DE LOS PIESLA ELECCIÓN DE LOS ZEBEDEOSNOTICIASTERCIO FEMENINO «EL LAVATORIO DE LOS PIES»

El primer Año Santo Compostelano fue establecido por el Papa Calixto II en 1122 a través de la bula papal denominada Omnipotentis Dispositione. Coincidiendo con la colocación de la última piedra de la Catedral de Santiago, Calixto II le otorgó el privilegio de celebrar a partir de 1126 el Año Santo Jubilar siempre que la festividad de Santiago Apóstol cayese en domingo. A partir de entonces, en Compostela se podrían conseguir las mismas gracias que se otorgaban en Roma en los Años Jubilares.

Desde entonces, celebramos el Año Santo, también denominado Año Santo Jubilar, Año Santo Compostelano o Año Santo Jacobeo (Ano Santo Xacobeo, en gallego), cuando el 25 de julio coincide en domingo. En los últimos dos siglos, esta coincidencia se dio siguiendo una cadencia de 6, 5, 6 y 11 años, de forma que en cada siglo se celebraron un total de 14 Años Santos. Hay una excepción a esta norma: cuando el último año de un siglo no es bisiesto. En este caso, pueden pasar 7 o 12 años hasta que el Día del Apóstol vuelva a coincidir en domingo y que, por tanto, sea Año Santo.

Siguiendo esta cadencia temporal, 2021 fue Año Santo, siendo una fecha especial, porque hace once años que no se celebraba. No obstante, las personas que no pudieron realizar durante ese año el Camino de Santiago o no pudieron viajar a Compostela no deben preocuparse, ya que el Papa Francisco ha prorrogado al Año Santo hasta el 2022, por la pandemia, tratando de evitar así aglomeraciones prohibidas o no aconsejadas.

Además, el 2021 fue el Año Santo número 120 de la historia de los Xacobeos. De la misma manera, tras estos dos años, nos esperan varios Años Santos seguidos: 2027, 2032 y 2038.

Alberto Montoya Gracia
Portapasos y directivo de la Agrupación de Santiago Apóstol

Santiago Apóstol de peregrino
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Artículo nº2 – TRAS LAS HUELLAS DE UN ICONO. «LOS HACHOTES SANTIAGUISTAS»

04/03/2022AGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGOAGRUPACIÓN DE SANTIAGO APÓSTOLCOFRADÍA CALIFORNIAEL LAVATORIO DE LOS PIESLA ELECCIÓN DE LOS ZEBEDEOSNOTICIASTERCIO FEMENINO «EL LAVATORIO DE LOS PIES»

Muchos serían los atributos de la iconografía cristiana que podríamos utilizar para los hachotes de la Agrupación California de Santiago Apóstol de Cartagena. Empezando por la Cruz, como principal símbolo identificador de la Orden de los Caballeros de Santiago, y también uno de los símbolos del Camino de Santiago.

Santiago, aquel guerrero desconocido sobre el caballo blanco, espada en ristre y segando la cabeza de 70.000 infieles, así se apareció el patrón de España, según la leyenda, en la batalla de Clavijo. Una escena que ayudó a dar forma a la identidad nacional durante siglos.

La figura de Santiago Matamoros, el Apóstol guerrero, se convirtió en el verdadero estandarte de la Reconquista desde que el 23 de mayo del año 844, se apareció ante el Rey Ramiro I, montado a caballo y con espada en mano, para ayudar a vencer las tropas de Abderramán II.

La Concha de Santiago o Vieira gallega es otro símbolo importante del Apóstol, que estará muy presente como emblema en la peregrinación a Compostela. La Concha se puede ver en las enseñas del Camino, en edificios, etcétera; pero además es parte consustancial de todo peregrino, pues debe de llevar la Concha de Santiago durante todo el trayecto de la peregrinación.

Los citados atributos eran los pilares necesarios para que un pintor realizara el boceto del hachote de la Agrupación de Santiago Apóstol de la Cofradía California.

La Agrupación santiaguista, en su primera época, solo procesionaba en el cortejo pasionario del Martes Santo, en la llamada Procesión del Traslado de los Apóstoles. Los nuevos hachotes tenían que estar a la altura, en diseño y fabricación, de los hachotes de las otras dos Agrupaciones hermanas.

Finalizaba el año 1980, cuando el directivo y Mayordomo santiaguista, Diego Sánchez Paredes, me presentó a un compañero del Banco de Bilbao, con la connotación de ser un gran pintor, Alfonso Romero Solana, a quien le expliqué cómo debían ser los hachotes del Santiago y comenzamos la singladura del diseño.

En verdad, es muy complicado el expresar tus ideas o pensamientos idílicos a un artista y que le dé la interpretación que tú deseas. Esto no quiere decir que anuláramos la creatividad del pintor, simplemente eran los cimientos sobre los cuales tenía que dar rienda suelta a su creatividad y por ende, a su arte. Además, en muy poco espacio, había que darle cabida a diferentes símbolos iconográficos, imprescindibles para mí, y que se identificaban con el Discípulo que trajo la “Luz del Evangelio” a España por Cartagena.

Mi idea no era otra que la Vieira o Concha de Santiago estuviera en la parte inferior de la base de la cabeza del hachote, en número de dos o tres, dando forma, apoyo y sostén, para que completamente encima de ellas se sostuvieran tres cabezas de caballo colocadas igual que las que se encuentran en la fuente de la Plaza de las Platerías en Santiago de Compostela.  Dicha fuente la descubrí en un viaje familiar a la capital gallega y pensé rápidamente en el “Hachote Santiaguista”.

Del centro del hachote y unidos por las crines largas de los caballos, emanaría la “Luz Blanca del Evangelio”, que entró en España por el castizo Barrio de Santa Lucía y que tantas veces predicó el Apóstol. Esa luz tenía que estar coronada por la Cruz de Santiago.

Esta fue la explicación que le di al artista Alfonso Romero Solana y que rápidamente se puso manos a la obra.

Boceto de Alfonso Romero Solana

Así pues, en el mes de marzo de 1981, teníamos boceto del hachote y comencé las gestiones con el prestigioso orfebre valenciano Manuel Orrico Gay, dando comienzo a una comunicación fluida tanto telefónica como escrita, pues le mandamos el trabajo del artista cartagenero, además de diferentes explicaciones hasta que, en el mes de mayo del mismo año, realiza un hachote de prueba y nos lo manda.

La prueba no era la idea que le habíamos dado, la interpretación era muy distinta, pues el orfebre valenciano realizó una concha grande, a modo de plato, donde brotaba el resto de la idea con los motivos iconográficos, no siendo este de nuestro agrado.

En junio de 1981, con la prueba del hachote en ristre, marché a Valencia, dirección a los Talleres de Casa Orrico. Fue todo un placer conocer a Manuel Orrico Gay, gran orfebre y mejor persona, con quien compartí casi toda una jornada en su taller y dándonos tiempo para degustar una exquisita paella valenciana. Le expliqué mi idea de lo que pretendía que fuera el hachote para la Agrupación de Santiago Apóstol.

Con el dibujo del pintor Alfonso Romero en mano, le expliqué a Manuel Orrico, la idea que yo tenía y, que el artista cartagenero no las interpretó del todo en su trabajo.

El orfebre valenciano captó totalmente mi idea y se comprometió a realizar un nuevo dibujo a tamaño real del hachote santiaguista.

Una vez pasado el periodo estival, Manuel Orrico se puso en contacto conmigo para comentarme que nos mandaba el dibujo concluido del hachote, a escala real, con la caña del mismo en forma de columna salomónica.

El dibujo del hachote de Orrico recogía la esencia del boceto del pintor cartagenero Alfonso Romero y cumplía con las explicaciones dadas por mí, que no eran otras que conjugar los atributos iconográficos del Apóstol, con el barroco exacerbado de las procesiones cartageneras.

Casa Orrico

Así pues, en Junta Directiva del mes de octubre de 1981, presidida por el Mayordomo José Ramón Bustillo Navia Osorio, se aprobaba el boceto y la realización de los hachotes por el orfebre Manuel Orrico Gay. Se tomó el acuerdo de encargar 40 hachotes, 5 portagalas, 5 varas salomónicas rematadas por una concha con la Cruz de Santiago para los hermanos vara y el varal del estandarte, con filigranas en la cruceta horizontal y con remate de la concha y Cruz de Santiago.

Contrato casa Orrico

La instalación eléctrica de los hachotes fue realizada por Vicente Díaz Izquierdo, llevando tres bombillas pequeñas de color amarillo y en el tubo central, dos luces fluorescentes.

Los hachotes y el resto de enseres realizados por el orfebre valenciano se estrenaron el Martes Santo de 1982, siendo Mayordomo Presidente de la Agrupación de Santiago Apóstol, Francisco Cerón Albacete y Hermano Mayor de la Cofradía California, Pablo Francisco López Álvaro.

Sin duda alguna, la realización de los nuevos hachotes fue un éxito importante por su estética y la conjunción del bronce plateado y dorado, ya que las tres cabezas de los caballos y las tres conchas son plateadas, destacando del resto del hachote, que es dorado. La corona de donde emerge la Cruz de Santiago es bronce dorado, así como la caña del mismo con forma de columna salomónica, también dorada.

Estos hachotes llevan desfilando, en la Semana Santa cartagenera y en las noches primaverales de Martes Santo, 37 años.

Treinta y siete años consecutivos, donde los hermanos y hermanas penitentes alumbrantes santiaguistas desfilan al son de  la marcha Solemnidad  por las calles cartageneras con los hachotes que se realizaran en los Talleres de Orfebrería de la Casa Orrico, cumpliendo así, de manera anual, su tradición de realizar su Estación de Penitencia o Procesión de Penitencia, cual peregrino que apoyándose en su báculo realiza el Camino de Santiago, con la esperanza, la firmeza y la oración, que les lleva a la “Luz del Evangelio”, y que tantas veces predicó el Apóstol Santiago.

Con este pequeño y humilde trabajo, pretendo dejar constancia, como fuente escrita, del auténtico origen de los hachotes de Martes Santo de la Agrupación de Santiago Apóstol. Para ello me he apoyado en los dibujos y bocetos originales, (custodiados por mi familia y en la actualidad, en posesión de la Agrupación), con la documentación escrita de la Casa Orrico y mi vivencia personal como directivo de la Agrupación, que fui por aquellos años.

Vuestro siempre hermano.